A muchos, o a casi todos de los que pudimos estar en la fiesta del DIA DE ANTANO,
el trillo nos hizo recordar aquellos días inolvidables, cuando siendo niño o jóvenes, pasamos largas horas en la era, montados en el trillo, o haciendo otras muchas tares, de lo que era el arte de, preparar el grano y la paja, que se recogía después de trillar.

(19 de Agosto de 2010)

Ya quedan pocos trillos
bonita fot de reucerdo de veranos como os de antes
un saludo
El día de ANTAÑO fue un día muy especial para todo los que pudimos disfrutar de él. Nos hizo recordar esos momentos, en los que siendo niños o jóvenes, pudimos vivir en primera persona, el arte de trillar. Momentos inolvidables, en los que pudimos descubrir y sentir que a pesar del tiempo, algunas cosas no se olvidan fácilmente. Para todos mis paisanos, con cariño.