Yo no he dicho nada de que los gays sean personas diferentes a los que no lo somos; vosotros sois los que decis (en virtud de vuestros actos de prerrogativas concedidas a ese colectivo en detrimento de los demás), que los que no son normales son los que no somos gays.
Por supuesto que tienen derecho a enamorarse, ya que cualquiera hemos sentido el amor en alguna etapa de nuestra vida.
Pero hay que tener en cuenta que esa forma de enamoramiento es una forma desviada de entender el amor.
Lo único que digo, y de lo que estoy en contra es que la unión de personas del mismo sex0 en modo alguno es asimilable ni equiparable al matrimonio, y considero que la propia idea de un matrimonio homose xual es un engaño que contradice la misma esencia del matrimonio.
Ni siquiera es válido denominar con la palabra «matrimonio» (unión estable de un hombre y de una mujer) a estas uniones homose xuales, porque desfiguran en su misma entraña lo que esta palabra expresa y ha expresado siempre en todas las regiones de la tierra y en todos los tiempos.
Por lo que a esa unión, solamente se la puede denominar “unión”. Ya que no pueden confundirse las palabras.
El anteproyecto de ley que equipara las uniones homosex uales a los matrimonios va en contra de la naturaleza, de la familia y de una sociedad sana.
Y aunque la gente se obceca en pensar que como cuenta con un apoyo mayoritario es la decisión más acertada, yo digo que las mayorías también se equivocan. El ejemplo más claro nos le dio Alemania hace años: la mayoría eligió a Hi tler, y el paso del tiempo demostró que la decisión no fue la más acertada.
Así que oponerse a que las uniones homosex uales sean equiparadas a los matrimonios es respetar la verdad de las cosas, y no ir contra nada ni nadie.
Pero lo peor de todo esto es la adopción de niños por parejas del mismo sex0. Estas adopciones por parte de parejas homosex uales son ilegales y acarrean daño para los niños.
Asimismo una pareja homose xual no es el ambiente más adecuado para el pleno desarrollo humano del niño.
Además los menores tienen derecho a crecer en un ambiente familiar que se asemeje lo más posible al de la familia natural.
Esta ley es inaceptable e injusta, ya que por tratarse de derechos humanos fundamentales no se puede invocar en este caso la tolerancia. La cuestión de fondo no es si los adultos homosex uales tienen derecho a la adopción, sino los derechos de los niños, que tras verse privados de una familia propia, no deben ser sometidos a una nueva prueba y tienen derecho a crecer en un ambiente familiar que se asemeje lo más posible al de la familia natural de la que carecen.
¿Qué derecho se puede invocar para que un niño tenga que vivir premeditadamente sin la figura del padre y de la madre cuando el derecho fundamental es el del niño, al que, adoptado por estas parejas, le faltará la experiencia de la paternidad o la maternidad, algo que no se sufre sin grave daño para el niño?.
Esta falta de figura paterna o materna se agrava en el caso de las parejas hom osexuales porque ha de vivir bajo el influjo de dos padres o dos madres y, además, en aspectos educativos fundamentales la débil personalidad del niño queda en este caso sin protección.
Por lo que concluyo diciendo que la adopción por parte de estas parejas no respeta el principio de bien superior del niño y concluye en un vacío antropológico.
En vista de la futura aprobación de esta ley de degeneración humana, que el señor alcalde vaya preparando el atril de los bodorrios, que porque le lluevan.
Esta ley puede traer consecuencias muy graves, porque si se reforma el código civil para un colectivo de 500.000 personas, sin una clara solicitación, ¿que pasará si el colectivo musulmán (más de 2.000.000 de personas) pide la legalización de la poligamia?. Pues para el defensor de los gays le parecerá muy bien porque tendrán varias mancebas ¿o mancebos?.
Esta ley demuestra más claramente aún el talante de nuestros go
Yo creo que con esta aclaración te habrá quedado bastante claro lo que pienso en referencia a ese tema, por lo que ya no voy a dedicar más tinta a ese tema y me dedicaré a lo que me interesa.
CANUTO II.
Por supuesto que tienen derecho a enamorarse, ya que cualquiera hemos sentido el amor en alguna etapa de nuestra vida.
Pero hay que tener en cuenta que esa forma de enamoramiento es una forma desviada de entender el amor.
Lo único que digo, y de lo que estoy en contra es que la unión de personas del mismo sex0 en modo alguno es asimilable ni equiparable al matrimonio, y considero que la propia idea de un matrimonio homose xual es un engaño que contradice la misma esencia del matrimonio.
Ni siquiera es válido denominar con la palabra «matrimonio» (unión estable de un hombre y de una mujer) a estas uniones homose xuales, porque desfiguran en su misma entraña lo que esta palabra expresa y ha expresado siempre en todas las regiones de la tierra y en todos los tiempos.
Por lo que a esa unión, solamente se la puede denominar “unión”. Ya que no pueden confundirse las palabras.
El anteproyecto de ley que equipara las uniones homosex uales a los matrimonios va en contra de la naturaleza, de la familia y de una sociedad sana.
Y aunque la gente se obceca en pensar que como cuenta con un apoyo mayoritario es la decisión más acertada, yo digo que las mayorías también se equivocan. El ejemplo más claro nos le dio Alemania hace años: la mayoría eligió a Hi tler, y el paso del tiempo demostró que la decisión no fue la más acertada.
Así que oponerse a que las uniones homosex uales sean equiparadas a los matrimonios es respetar la verdad de las cosas, y no ir contra nada ni nadie.
Pero lo peor de todo esto es la adopción de niños por parejas del mismo sex0. Estas adopciones por parte de parejas homosex uales son ilegales y acarrean daño para los niños.
Asimismo una pareja homose xual no es el ambiente más adecuado para el pleno desarrollo humano del niño.
Además los menores tienen derecho a crecer en un ambiente familiar que se asemeje lo más posible al de la familia natural.
Esta ley es inaceptable e injusta, ya que por tratarse de derechos humanos fundamentales no se puede invocar en este caso la tolerancia. La cuestión de fondo no es si los adultos homosex uales tienen derecho a la adopción, sino los derechos de los niños, que tras verse privados de una familia propia, no deben ser sometidos a una nueva prueba y tienen derecho a crecer en un ambiente familiar que se asemeje lo más posible al de la familia natural de la que carecen.
¿Qué derecho se puede invocar para que un niño tenga que vivir premeditadamente sin la figura del padre y de la madre cuando el derecho fundamental es el del niño, al que, adoptado por estas parejas, le faltará la experiencia de la paternidad o la maternidad, algo que no se sufre sin grave daño para el niño?.
Esta falta de figura paterna o materna se agrava en el caso de las parejas hom osexuales porque ha de vivir bajo el influjo de dos padres o dos madres y, además, en aspectos educativos fundamentales la débil personalidad del niño queda en este caso sin protección.
Por lo que concluyo diciendo que la adopción por parte de estas parejas no respeta el principio de bien superior del niño y concluye en un vacío antropológico.
En vista de la futura aprobación de esta ley de degeneración humana, que el señor alcalde vaya preparando el atril de los bodorrios, que porque le lluevan.
Esta ley puede traer consecuencias muy graves, porque si se reforma el código civil para un colectivo de 500.000 personas, sin una clara solicitación, ¿que pasará si el colectivo musulmán (más de 2.000.000 de personas) pide la legalización de la poligamia?. Pues para el defensor de los gays le parecerá muy bien porque tendrán varias mancebas ¿o mancebos?.
Esta ley demuestra más claramente aún el talante de nuestros go
Yo creo que con esta aclaración te habrá quedado bastante claro lo que pienso en referencia a ese tema, por lo que ya no voy a dedicar más tinta a ese tema y me dedicaré a lo que me interesa.
CANUTO II.