Debido al estado de la mar no pudo acercarse a la costa, por lo que decidió desembarcar en la villa de Estabia, donde se alojó en casa de su amigo Pompeyano; y donde además se vio retenido por la llegada de la lava del Vesubio. Tras conseguir escapar de la villa con sus moradores se dirigieron hacía la playa, donde murió asfixiado por los vapores sulfurosos emanados de la lava del volcán.