Stephen Sauvestre, arquitecto en jefe de la empresa Eiffel es llamado para colaborar en el proyecto y vuelve a dibujar completamente el
edificio para darle otra envergadura: añade un pesado pie de mampostería y une la
torre hasta el primer piso mediante
arcos, reduce el número de plataformas de cinco a dos, hace del diseño de la torre algo parecido a un
faro, entre otros cambios