Luz ahora 0,07042 €/kWh

ALBARES (Guadalajara)

Mi Nancy y sus conjuntos; traje tenista
Foto enviada por IR

Señito si quieres algún gatito más, te mando por seur alguno, sin coste alguno totalmente gratis, ¡vaya oferta! no la puedes rechazar.
no muchas gracias, no quiero que te gastes el dinero, estamos en crisis, y a mi me tiene el inen como fijo jajajajaja
Señito si quieres algún gatito más, te mando por seur alguno, sin coste alguno totalmente gratis, ¡vaya oferta! no la puedes rechazar.
IR no seas tan mala y pon comida a los gatitos.
Señito si quieres algún gatito más, te mando por seur alguno, sin coste alguno totalmente gratis, ¡vaya oferta! no la puedes rechazar.
LE dice un HOMBRE a un albañil, me tienes que hacer una casa, es que traje 20000
marcos de ALEMANIA y le dice el albañil y para que quieres una casa con tantas ventanas ¿
muy bueno jajajajaja
LE dice un HOMBRE a un albañil, me tienes que hacer una casa, es que traje 20000
marcos de ALEMANIA y le dice el albañil y para que quieres una casa con tantas ventanas ¿
Catuno siempre pones una nota de humor, que no viene nada mal.
LE dice un HOMBRE a un albañil, me tienes que hacer una casa, es que traje 20000
marcos de ALEMANIA y le dice el albañil y para que quieres una casa con tantas ventanas ¿
jajaja, muy bueno catuno.
hola chicos estoy aquí.
LE dice un HOMBRE a un albañil, me tienes que hacer una casa, es que traje 20000
marcos de ALEMANIA y le dice el albañil y para que quieres una casa con tantas ventanas ¿
hola ir, muy buenas? tu de futbol nada verdad ¿
Nada de nada.
hola chicos estoy aquí.
hola ir, muy buenas? tu de futbol nada verdad ¿
hola chicos estoy aquí.
buenas noches IR
hola chicos estoy aquí.
Lo único cierto es que no se vuelve a tener noticias de ella hasta su fallecimiento en el año 1591, cuando una escueta nota, daba fe de su fallecimiento a los 45 años de edad.
Sobre lo que fue de ella no hay nada seguro: hay quienes afirman que regresó a los barrios pobres a ejercer la prostitución para sobrevivir, otros le dan un destino más amable, permitiéndole un retiro en alguna mansión alejada, viviendo de sus recuerdos de gloria.
A pesar de esto, su reputación quedó destruida y su oficio proscrito, no quedándole otro remedio que desaparecer y regresar al anonimato del que había salido.
El juicio de Verónica está relacionado con este drástico cambio de mentalidad, aunque ella pudo salvarse gracias al importante número de “amistades” que había hecho entre los gobernantes de la ciudad.