casas del pueblo, VILLANUEVA DE LOS ESCUDEROS

A tres leguas de Cuenca, entre montañas y crestas, tocando los altos de Cabrejas, donde nace la Cordillera Oretana, visigodos y musulmanes acamparon sobre estas tierras.

Alfonso VIII, después de arrebatarle a los musulmanes Cuenca en el año 1177, el 7 de junio de 1185 da a la Orden de Santiago una aldea llamada "Villanueva", antiguamente denominada "Foios Rotundus", ubicada en el término de Cuenca entre las aldeas llamadas "Almerones" y "Casares de García Ramírez".

Durante los siglos XII y XIII, se instalaron aldeas y núcleos repoblativos y, sobre las ruinas y cimientos de poblaciones abandonadas, surgían los nuevos nombres de terminología romance castellana, "Hoyos Redondos", "La morrilla", "La fuente la Linda" y "Laza Conejo" pasando después al poblado de "El Casuto", como así se ha comprobado a través de los yacimientos arqueológicos: tumbas excavadas en roca, monedas, ermita o capilla, etc., hasta llegar a Villanueva, como fruto del asentamiento definitivo en las zonas de repoblación ganadas a lo largo de la Reconquista.

Tanto el rey Alfonso VIII como el Concejo se preocuparon en ampliar el alfoz de Cuenca, y en 1201 confirmaron el acuerdo por el que "Valtabaldo" quedaría para la Orden de Santiago, y "Villanueva" para Cuenca. Ya tenemos a Villanueva situada en una ladera, con vega y río -el arroyo del Ejidillo-, que nace en "la Fuente de la Zarza" y dominado por un enclave defensivo, recinto amurallado, con un arco de medio punto y portada almenada.

Aldea de Cuenca ya en el siglo XVI, cuando dependía del Rey y su población era de "cien vecinos" (unos quinientos habitantes), según el Libro de Visitas del Partido de la Mancha, año 1579. Vecindario suficiente para levantar la joya arquitectónica de su iglesia.
(Diciembre de 2018)