Debríamos plantearnos los jóvenes que vamos a la puebla de almenara, seamos o no nacidos alli, que no hacemos nada por ella quejándonos. Debríamos porner un poco más de nuestra parte y montar algo para que la puebla nose quede en el triste pueblo que es fuera de las fiestas, verano y navidad. ¡Menos quejarse y mas arrimar el hombro! y si es posible, sin intereses de por medio.