Se me olvidó mencionar que la vecina que las engañó para que coincidieran en la
puerta de los ultramarinos era la hija ilegítima de las dos susodichas ancianas, que arrastrada por la furia y la venganza en un acto desesperado intentó provocar entre ellas una pelea con graves consecuencias. Lo consuiguió y ahora está en manos de la ley, con rumores de que va a ser desterrada de
Pozorrubio y llevada a Horcajo donde pasará el resto de su vida.