18/05/2007
Corulla alardeaba del apoyo del alcalde para sus gestiones urbanísticas en Madrid
Escuchas policiales revelan contactos entre Gallardón y la testaferro de Roca
ELPLURAL.COM
Todo parece indicar que la tormenta política desatada tras el debate televisivo del miércoles entre los candidatos a la alcaldía de Madrid se encuentra muy lejos de terminar. En el programa de televisión, el aspirante socialista, Miguel Sebastián, quiso saber si existía alguna vinculación profesional entre Gallardón y la abogada Montserrat Corulla, testaferro de Roca y detenida por operaciones de blanqueo de dinero. A la airada reacción del Alcalde de Madrid ante la pregunta de Sebastián se suman ahora una serie de datos sobre escuchas policiales realizadas a Corulla en el pasado, en las que la testaferro de Roca menciona en varias ocasiones a Gallardón y a otros cargos del Ayuntamiento de Madrid como ayudas y apoyos para que sus gestiones salieran adelante, a pesar de las dificultades surgidas, algunas de ellas, con la ley.
La polémica iniciada con las impertinentes preguntas de Sebastián en el debate televisivo de ayer cumple hoy un nuevo capítulo. Según algunos datos publicados en medios de comunicación y aportados por fuentes próximas a Ferraz y al candidato socialista, la abogada Monserrat Corulla –que ha pasado 5 meses en prisión por la “operación malaya” y tiene pendiente el pago de una fianza de 50 millones de euros- realizó en el pasado negocios urbanísticos en Madrid jactándose ante empresarios y promotores de su relación con el Alcalde de la ciudad, para garantizar que cualquier licencia de obra o remodelación se agilizara gracias a sus contactos privilegiados.
“Yo como todos los días con Gallardón”
No en vano, las citadas fuentes relatan que, en la primera semana de octubre de 2005, Montserrat Corulla realizó una visita concertada junto a dos arquitectos, para estudiar el estado de conservación en que se encontraba un frontón llamado Beti-Jai, de 3.420 metros cuadrados de superficie y situado en la zona más cara de Madrid. En esta reunión, Corulla sorprendió a sus contertulios cuando presumió de su amistad con Gallardón: “Yo como todos los días con Gallardón y aquí se construirá un hotel de lujo”.
Se lo ponían fácil
Por otro lado, las grabaciones policiales realizadas a Corulla, por orden judicial y que han sido incorporadas al sumario del caso Malaya, muestran que, cuando menos, había una especial diligencia a la hora de facilitar las operaciones urbanísticas de Corulla por parte de destacados cargos del Ayuntamiento de Madrid y también de la Comunidad.
“Se puede hablar con Alberto”
Del contenido de estas grabaciones se desprende que Corulla gestionó la venta del viejo frontón Beti-Jai (propiedad de unos empresarios vascos) a una empresa hotelera, no sin dificultades para su recalificación. En las conversaciones intervenidas aparecen los nombres de Javier Hernández, director de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, y el de Alberto Ruiz-Gallardón. Javier Hernández habría jugado un papel cómplice en el proyecto “encajándoselo a sus técnicos”, mientras que Gallardón figuraría como la persona a la que recurrir para recalificar dicho inmueble: “Se puede hablar con Alberto para hacer un canje de suelo”. De las grabaciones se deduce que tal recalificación tuvo lugar finalmente y, además, que el alcalde de Madrid estaba bien enterado de los detalles de la operación.
De Ayuntamiento y Comunidad
Otros nombres que aparecen implicados en estas gestiones son los de Pilar Martínez –Concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, que habría dado “un empujón muy fuerte” a alguno de los proyectos de Corulla-, Beatriz Lobón –coordinadora general del urbanismo madrileño-, y Pablo Valle –jefe del Departamento de Zonas Protegidas II del Ayuntamiento de Madrid-. Este último le habría ayudado en operaciones –algunas interrumpidas en principio por la policía- en propiedades del ex concejal de Urbanismo Juan Antonio Roca: el Palacio de Saldaña y el Palacio ángel de Tepa.
¿Un tema personal?
El alcalde de Madrid y candidato a la reelección del PP, Alberto Ruiz-Gallardón, no ha respondido ni declarado nada en relación con estos hechos, al tiempo que ha denunciado el interés por estos sucesos como una forma de "ataque personal", que sería similar al sufrido por su prima Cécilia Sarkozy, cuando durante la campaña electoral francesa se airearon sus problemas conyugales con el ahora presidente de Francia. Por su parte, Sebastián ha aclarado que no le interesa "en absoluto la vida privada de Gallardón" y que la conclusión del debate es que para el alcalde "el urbanismo en Madrid es un tema personal".
Responsabilidad pública
Sebastián ha querido insistir en que sólo le preguntó "si como alcalde había mantenido alguna relación con algunas de las personas implicadas en la ‘operación Malaya' acerca de actuaciones urbanísticas en la ciudad de Madrid". Una pregunta que, calificada por el alcalde como “asunto personal”, no ha obtenido aún ninguna respuesta concreta.
Corulla alardeaba del apoyo del alcalde para sus gestiones urbanísticas en Madrid
Escuchas policiales revelan contactos entre Gallardón y la testaferro de Roca
ELPLURAL.COM
Todo parece indicar que la tormenta política desatada tras el debate televisivo del miércoles entre los candidatos a la alcaldía de Madrid se encuentra muy lejos de terminar. En el programa de televisión, el aspirante socialista, Miguel Sebastián, quiso saber si existía alguna vinculación profesional entre Gallardón y la abogada Montserrat Corulla, testaferro de Roca y detenida por operaciones de blanqueo de dinero. A la airada reacción del Alcalde de Madrid ante la pregunta de Sebastián se suman ahora una serie de datos sobre escuchas policiales realizadas a Corulla en el pasado, en las que la testaferro de Roca menciona en varias ocasiones a Gallardón y a otros cargos del Ayuntamiento de Madrid como ayudas y apoyos para que sus gestiones salieran adelante, a pesar de las dificultades surgidas, algunas de ellas, con la ley.
La polémica iniciada con las impertinentes preguntas de Sebastián en el debate televisivo de ayer cumple hoy un nuevo capítulo. Según algunos datos publicados en medios de comunicación y aportados por fuentes próximas a Ferraz y al candidato socialista, la abogada Monserrat Corulla –que ha pasado 5 meses en prisión por la “operación malaya” y tiene pendiente el pago de una fianza de 50 millones de euros- realizó en el pasado negocios urbanísticos en Madrid jactándose ante empresarios y promotores de su relación con el Alcalde de la ciudad, para garantizar que cualquier licencia de obra o remodelación se agilizara gracias a sus contactos privilegiados.
“Yo como todos los días con Gallardón”
No en vano, las citadas fuentes relatan que, en la primera semana de octubre de 2005, Montserrat Corulla realizó una visita concertada junto a dos arquitectos, para estudiar el estado de conservación en que se encontraba un frontón llamado Beti-Jai, de 3.420 metros cuadrados de superficie y situado en la zona más cara de Madrid. En esta reunión, Corulla sorprendió a sus contertulios cuando presumió de su amistad con Gallardón: “Yo como todos los días con Gallardón y aquí se construirá un hotel de lujo”.
Se lo ponían fácil
Por otro lado, las grabaciones policiales realizadas a Corulla, por orden judicial y que han sido incorporadas al sumario del caso Malaya, muestran que, cuando menos, había una especial diligencia a la hora de facilitar las operaciones urbanísticas de Corulla por parte de destacados cargos del Ayuntamiento de Madrid y también de la Comunidad.
“Se puede hablar con Alberto”
Del contenido de estas grabaciones se desprende que Corulla gestionó la venta del viejo frontón Beti-Jai (propiedad de unos empresarios vascos) a una empresa hotelera, no sin dificultades para su recalificación. En las conversaciones intervenidas aparecen los nombres de Javier Hernández, director de Patrimonio Histórico de la Comunidad de Madrid, y el de Alberto Ruiz-Gallardón. Javier Hernández habría jugado un papel cómplice en el proyecto “encajándoselo a sus técnicos”, mientras que Gallardón figuraría como la persona a la que recurrir para recalificar dicho inmueble: “Se puede hablar con Alberto para hacer un canje de suelo”. De las grabaciones se deduce que tal recalificación tuvo lugar finalmente y, además, que el alcalde de Madrid estaba bien enterado de los detalles de la operación.
De Ayuntamiento y Comunidad
Otros nombres que aparecen implicados en estas gestiones son los de Pilar Martínez –Concejala de Urbanismo del Ayuntamiento de Madrid, que habría dado “un empujón muy fuerte” a alguno de los proyectos de Corulla-, Beatriz Lobón –coordinadora general del urbanismo madrileño-, y Pablo Valle –jefe del Departamento de Zonas Protegidas II del Ayuntamiento de Madrid-. Este último le habría ayudado en operaciones –algunas interrumpidas en principio por la policía- en propiedades del ex concejal de Urbanismo Juan Antonio Roca: el Palacio de Saldaña y el Palacio ángel de Tepa.
¿Un tema personal?
El alcalde de Madrid y candidato a la reelección del PP, Alberto Ruiz-Gallardón, no ha respondido ni declarado nada en relación con estos hechos, al tiempo que ha denunciado el interés por estos sucesos como una forma de "ataque personal", que sería similar al sufrido por su prima Cécilia Sarkozy, cuando durante la campaña electoral francesa se airearon sus problemas conyugales con el ahora presidente de Francia. Por su parte, Sebastián ha aclarado que no le interesa "en absoluto la vida privada de Gallardón" y que la conclusión del debate es que para el alcalde "el urbanismo en Madrid es un tema personal".
Responsabilidad pública
Sebastián ha querido insistir en que sólo le preguntó "si como alcalde había mantenido alguna relación con algunas de las personas implicadas en la ‘operación Malaya' acerca de actuaciones urbanísticas en la ciudad de Madrid". Una pregunta que, calificada por el alcalde como “asunto personal”, no ha obtenido aún ninguna respuesta concreta.