Mira, muchacho, se te has equivocado reconocerlo no es pecado. Es muy simple, pide perdón. Di, lo siento, he criticado algo que no debía, he metido la pata y he criticado a una candidata por el hecho de ser mujer y lo siento, os pido disculpas a todos y, en especial, a Mari Gloria.
Y no vuelvas a insistir, que estas han sido tus palabras con lo que has demostrado lo que eres.
«si la única orden que ha dado Mari Gloria es: More, pon la mesa, y seguro que ni le hizo caso. Por favor, Mari Gloria sin ayuda de sus concejales, no va a saber ni abrir la puerta del despacho del ayuntamiento.»
«Pon la mesa» Esto, muchacho, ¿que crítica es? Nos lo puedes aclarar, si puedes.
Y no vuelvas a insistir, que estas han sido tus palabras con lo que has demostrado lo que eres.
«si la única orden que ha dado Mari Gloria es: More, pon la mesa, y seguro que ni le hizo caso. Por favor, Mari Gloria sin ayuda de sus concejales, no va a saber ni abrir la puerta del despacho del ayuntamiento.»
«Pon la mesa» Esto, muchacho, ¿que crítica es? Nos lo puedes aclarar, si puedes.