El color del otoño, CUEVAS DE VELASCO

(Octubre de 2010)
Hacía ya muchos fines de semana que no me tomaba el tiempo de disfrutar de un paseo largo, sin prisas ni pretensiones.
Los días de otoño en los que el sol se hace presente son un regalo divino pero, reconozco, que me seduce mucho más el paisaje en esta época del año si el día amanece nublado, como hoy.
La lluvia de estos días ha transformado los caminos. La tierra resquebrajada ya no cruje bajo mis pies, muy al contrario, tengo la sensación de pisar una gran esponja, jugosa, suave …
Bordeo un...