A Doña Gregoria de la Cuba y Clemente, CUENCA

Por deseos de ella, se construyó un edificio para escuelas. Con el patrimonio que legó, se sufragaban los estudios de los niños, pensionaba a los artistas jóvenes sin recursos, sufragaba el aprendizaje de oficios, realizaba obras para colocar a los obreros en las épocas difíciles, entregaba sus huertas a los campesinos.