Marce, no castigues la rodilla de Rafi, tiempo al tiempo.-besitos
Emilio pero si se la castiga ella sola, se echa el aceite del pisto encima y se la ha quemado. Como puedes comprobar esta mujer no tiene remedio, no entiendo como la dejan salir del manicomio sin que haya un loquero a su lado para controlarla. Algún día nos busca la ruina.