Seguro que me llamareis pesado, pero me da lo mismo, yo a lo mio.
Empece ha contaros mis vacaciones, y voy ha seguir, este es el segundo
capitulo.
Nos quedamos en que habiamos engalanado la parcela de Andrea y Mario.
A continuacion pasamos ha dar cuenta de una suculenta paella hecha por
Mario, el especialista, que como todas las que hace estaba para chuparse los dedos, estando en la sobremesa, no se entienda encima de la mesa, recibimos la
llamada de nuestros ilustres invitados, estaban de camino para Oropesa, nos
pusimos en marcha y fuimos todo presto a recibirles como se merecen, en la
salida del peaje de la autopista, era para que no se despistaran nada mas.
Esto ocurria el dia 2 de agosto era por la tarde noche, repartimos a los invitados segun relaciones de cuando eramos chavales, entiéndase APOLONIO
en mi casa y Graci donde Loli, se me olvidaba con sus respectivos.
Esa noche degustamos unos suculentos manjares que nos ofreció con todo su cariño Loli, la velada se prolongo hasta bien entrada la madrugada, el tiempo corría sin darnos cuenta, estábamos tan agustito que nadie se daba cuenta de la hora que era, nos marchamos a las tres de la madrugada los invitados venían de viaje y necesitaban descansar, creo que esa fue la escusa para irnos a la cama u otra parecida no me acuerdo.
Pasamos al día 3 del mismo mes de agosto. empezamos la mañana haciendo una visita a Marina Dor, y sus jardines, se hizo una sesión de fotos, que ya os mandare a no ser que ya esteis saturados de fotos, tomamos unas cervecitas y volvimos los hombres por delante aceptando ordenes, para pelar patatas poner la mesa y hacer unas cuantas cosas mas, luego volví a Marina Dor a recoger a las jefas, ese día comimos en mi casa, y creo que empalmamos la comida con la cena, me apuntan que salimos ha dar una vuelta por la playa, para rebajar, y de paso marcarnos un baile en una pista al aire libre que había en la playa, y cuando a Manolo marido de Graci se le hacia hueco en el estomago volvimos para cenar, y tener otra velada, de esas que nunca te cansas, en las que alguien dice vamonos que esta gente querrá acostarse, al siguiente dia nos esperaba la comida del
CORDERO, pero esto queda para otro capitulo.
Decirme si soy pesao
Empece ha contaros mis vacaciones, y voy ha seguir, este es el segundo
capitulo.
Nos quedamos en que habiamos engalanado la parcela de Andrea y Mario.
A continuacion pasamos ha dar cuenta de una suculenta paella hecha por
Mario, el especialista, que como todas las que hace estaba para chuparse los dedos, estando en la sobremesa, no se entienda encima de la mesa, recibimos la
llamada de nuestros ilustres invitados, estaban de camino para Oropesa, nos
pusimos en marcha y fuimos todo presto a recibirles como se merecen, en la
salida del peaje de la autopista, era para que no se despistaran nada mas.
Esto ocurria el dia 2 de agosto era por la tarde noche, repartimos a los invitados segun relaciones de cuando eramos chavales, entiéndase APOLONIO
en mi casa y Graci donde Loli, se me olvidaba con sus respectivos.
Esa noche degustamos unos suculentos manjares que nos ofreció con todo su cariño Loli, la velada se prolongo hasta bien entrada la madrugada, el tiempo corría sin darnos cuenta, estábamos tan agustito que nadie se daba cuenta de la hora que era, nos marchamos a las tres de la madrugada los invitados venían de viaje y necesitaban descansar, creo que esa fue la escusa para irnos a la cama u otra parecida no me acuerdo.
Pasamos al día 3 del mismo mes de agosto. empezamos la mañana haciendo una visita a Marina Dor, y sus jardines, se hizo una sesión de fotos, que ya os mandare a no ser que ya esteis saturados de fotos, tomamos unas cervecitas y volvimos los hombres por delante aceptando ordenes, para pelar patatas poner la mesa y hacer unas cuantas cosas mas, luego volví a Marina Dor a recoger a las jefas, ese día comimos en mi casa, y creo que empalmamos la comida con la cena, me apuntan que salimos ha dar una vuelta por la playa, para rebajar, y de paso marcarnos un baile en una pista al aire libre que había en la playa, y cuando a Manolo marido de Graci se le hacia hueco en el estomago volvimos para cenar, y tener otra velada, de esas que nunca te cansas, en las que alguien dice vamonos que esta gente querrá acostarse, al siguiente dia nos esperaba la comida del
CORDERO, pero esto queda para otro capitulo.
Decirme si soy pesao
