El martes
noche llegué a Hinojosas, pues el miércoles estuve en el sepelio de un familiar ya mayor. Allí vi a Feli y a su marido y nos saludamos. Hacía -6 grados y todavía tengo la cara
helada. Hacía tiempo que no pasaba tanto frío, pero se pudo sobrellevar.
¡que llegue pronto la
primavera!