Ofertas de luz y gas

MINA DIOGENES: Luismi, anoche en el programa "El Larguero" de la SER...

Como gran aficionado al futbol y ex-futbolista semi-profesional, quiero mandar un mensaje de sentimiento profundo a la familia de JUAN CARLOS ARTECHE, ex-futbolista del Racing de Santander y del At. de Madrid, también de la Selección Española, que falleció ayer de madrugada a los 53 años de edad, víctima de esa maldita enfermedad que es el cáncer.
Mi sentimiento es más profundo ya que lo conocía personalmente debido a nuestras actividades laborales en los años 94,95 y 96, él era representante de una marca deportiva y yo regentaba una tienda de deportes en la calle Clara del Rey, cada vez que me visitaba nos tomábanos un cafetito en el Bar DEZA de la misma calle, la conversación siempre giraba en torno a temas personales, lógicamente él con más experiencia que yo y curtido en batallas mucho más importantes que las mias, amén del litigio con el Sr. Gil y Gil.
Era un grán tipo, descansa en páz y estés donde estés, JUAN CARLOS, recibe un fuerte abrazo de este conocido.

Luismi, anoche en el programa "El Larguero" de la SER estuve oyendo una entrevista que le hicieron hacía justamente ayer un año cuando ya estgaba bastante pachuco y se me saltaron las lágrimas. Todo lo que tenía de tosco en el campo le sobraba de buena gente. Oirle decir con toda naturalidad que iba a vencer al "vicho" daban escalofríos. Después entró en directo la hija mayor y con lo poco que pudo decir denotaba la clase de padre que ha sido. También hablaron muchos compañeros de la época suya: Ruiz (compañero como central) Abel, Pedraza.... todos hablaban maravillas y se les notaba que no era el típico cumplido. Esta gente sí que merece la pena. Un abrazo
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
Yo también estaba escuchando esta emisora, (soy asiduo a este programa), y recordaba perfectamente aquella entrevista, todo lo que has tenido cerca lo sientes quizá con más profundidad.
Creo que fué Pardeza el que no podia hablar y tuvieron que pasar varios segundos inteminables hasta que se le pasó la angustia.
La anecdota del mono en la estación fué genial.
Un abrazo.