Buenos días Andrea; ya estoy bien; espero que tú lo eches fuera (el catarro, digo) y no le permitas que se instale en tus aposentos corporales.
El entierro estuvo flojito. A la hora de la salida llovía bastante y después también. Pero mis
amigas y yo nos dimos unos
paseos bajo el paraguas (no hacía frío) y, posteriormente, nos aposentamos en uno de esos lugares en los que te puedes tomar alguna cosilla y allí estuvimos de cháchara.
Besos a mami Alvarita. Un abrazo