Manolo Castaño, llevas razón, cuando tú vivias en Diógenes no habia nada más que una tele, la de Gregorio, todos los niños ibais allí a ver la tele, os chupábais todo lo que ponian, hasta los telediarios, no habia cadenas para elegir.
Poco después de irte, llegó la tecnologia, todos nos fuimos actualizando con la cajita tonta, a los hombres del pueblo les cambió la vida, iban a su trabajo, cuando volvian, a subir al tejado para intentar sintonizar la cadena, la mayoria de los dias sólo se veia nieve y ruido, el paseito por el tejado era necesario para darle vueltecitas a la antena, yo creo que la llegaron a posicionar en todas las direcciones, estaban a veces 3 0 4 vecinos, cada uno con su antenita, la prueba es la foto.
Recuerdo a una niña que se llama Maria Cortés (no se sabe nada de ella) en su casa habian comprado una tele, la niña queria que su madre le diese seis pesetas para ir al cine con nosotros, su madre decia ¡tienes cine en casa! ¿para qué quieres más cine?
Al señor Basilio lo tenia olvidado, al decirlo tú lo he vuelto a recordar, creo que era soltero, recuerdo que también era amigo de mi padre y de verlo por la calle en donde viviamos.
¿Cómo se os ocurria ponerle petardos en la cerradura? vaya carotas mi hermanito y tú, os tenia que haber dado con la llave grandota en la cabeza, ¡vaya pillos!.
Un beso Pepi.
Poco después de irte, llegó la tecnologia, todos nos fuimos actualizando con la cajita tonta, a los hombres del pueblo les cambió la vida, iban a su trabajo, cuando volvian, a subir al tejado para intentar sintonizar la cadena, la mayoria de los dias sólo se veia nieve y ruido, el paseito por el tejado era necesario para darle vueltecitas a la antena, yo creo que la llegaron a posicionar en todas las direcciones, estaban a veces 3 0 4 vecinos, cada uno con su antenita, la prueba es la foto.
Recuerdo a una niña que se llama Maria Cortés (no se sabe nada de ella) en su casa habian comprado una tele, la niña queria que su madre le diese seis pesetas para ir al cine con nosotros, su madre decia ¡tienes cine en casa! ¿para qué quieres más cine?
Al señor Basilio lo tenia olvidado, al decirlo tú lo he vuelto a recordar, creo que era soltero, recuerdo que también era amigo de mi padre y de verlo por la calle en donde viviamos.
¿Cómo se os ocurria ponerle petardos en la cerradura? vaya carotas mi hermanito y tú, os tenia que haber dado con la llave grandota en la cabeza, ¡vaya pillos!.
Un beso Pepi.