Perico, tu siempre te depides porque te vas al
cine de las sábanas blancas.
Te voy a contar una anécdota relaconada con el cine de las sábanas blancas y que seguro que más de uno habeis vito.
Cuando no habia cine cerrado en mi
pueblo, de vez en cuando aparecía una camioneta con una máquina bastante aparatosa de reproducción de cintas que contenian películas. Colocaban una sabana en la parez del
Ayuntamiento y cada un@ con su silla se sentaba frente aquella pantalla improvisada.
Cuando hacía viento
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