Cuando visitamos nuestra Aldea del Rey querida, como recientemente ha sucedido; perdernos por sus campos y parajes es nuestra debilidad. Bien andando, en bici o en coche por todos sus caminos y vías de comunicación allá que vamos observando, contemplando y disfrutando. Nos congratulamos del estado en que ha quedado la carretera (antes carreterín) del Cortijillo, obra de la Diputación Provincial; con según nos dijeron, tres capas asfálticas depositadas, y con unos accesos a las fincas particulares envidiables, así como unas cunetas suficientemente profundas, amplias y limpias. Un ejemplo a seguir. Es un placer discurrir por esa carretera, según actualmente ha quedado. No obstante, no podemos decir lo mismo respecto de los caminos, particularmente de algunos muy significativos: Camino del Yedgo, Camino de Corral Moreno, Camino de la Higuera, Camino de Vaciacámaras, entre otros. Es una pena. Este verano vimos en el Tablón de Anuncios del Ayuntamiento, un escrito referente a la Ordenanza de Caminos, así como una comunicación de la alcaldía, en el sentido de sancionar a aquellos que no respetasen anchuras, accesos y cunetas. Nos pareció muy acertado. Sin embargo, nuestra decepción por su incumplimiento nos ha generado desasosiego. Se legisla... ¿para qué?. Nuestro defecto irredento. Bien podría el concejal de Caminos que, por cierto, ¿quién es?, desplazarse por los mismos y comprobar quienes no respetan lo legislado, y, además por sistema. También pudiera hacerlo, según nos indicaron, el concejal comodín, Donato Morena, que nos dicen no deja el coche oficial ni para c... Existen tramos de caminos donde las cunetas han sido roturadas e, igualmente, con los tractores acceden a ellos por donde les place. Esto no debe seguir así. No pretendemos generalizar, pues la mayor parte de los agricultores son sensibles a la legislación sobre caminos. Hay otros que por sistema la incumplen y, además con desfachatez y displicencia. La mejor notificación o escrito es tocar el bolsillo, como se hace actualmente en lo referente a la grúa respecto a los automóviles inadecuadamente aparcados y en horario de procesiones. Pensamos que es función del Guarda Rural, para eso cobra, la vigilancia y notificación al Ayuntamiento de los múltiples atentados que se cometen en los caminos rurales. Razón más que justificada es que todos pagamos impuestos al Ayuntamiento, incluso los que no residimos allí. Si el cumplimiento de la legislación algunos se la saltan a la torera, aplíquese el correctivo correspondiente, la sanción o multa. Ése duele.
07.10.08
Alter ego.
07.10.08
Alter ego.