Iglesia de trazas muchos sencillas, claro exponente del barroco catalán más simple. La
fachada es de
piedra picada con
portada rectangular, una
hornacina con
adornos barrocos y una
ventana para
rosetón. La estrechez de la
calle del Lobo (calle del Rey Martín) provoca el retroceso del cuerpo más oriental de la fachada principal la que por la simetría dada por la línea superior del frontis. El interior es de una sola nave y tiene un amplia crucero con
cúpula circular. El
campanario es de planta cuadrada con aberturas a cada lado y refuerzo superior. Fue construida por orden de los beneficiados de la
catedral en un solar
comprado que estaba en
ruinas y en la que había sido el beneficio de nuestra Sra. de las Puelles. Las obras se iniciaron el 9 de septiembre de 1724 y la iglesia fue bendecida el 5 de febrero de 1729. La licencia para la edificación fue concedida por el obispo Dr. Taberner, el capítulo de Sant Feliu y los jurados de la ciudad.