No hay supermercado, pero ¡no nos importa un pimiento!

Me alegra eso de volver a abrir casa paco, al menos así, de vez en cuando comeremos algo caliente, dá lo mismo una sopa de guinda que unas patatas a lo pobre. Pobre Isaías, que será de él, mucho me temo que se haya amoldadoa a su castillo, y no baje a la civilización, creo que estaá viviendo como los monjes del Tibet, meditando se pasa los dias, vamos, para volverse loco (que ya casi lo estaba) fué bajar del monte y quedarse media chalao, entre la vitineraria y la informática le cambiaron hasta el...
Que maravilla de verdad que bien se debe vivir y agusto
Isaías
Esto es Vozpornoche, gracias Aníbal y Carmen por dar a conocer tan maravilloso lugar, no lo cambiaria por ninguna de las llamadas maravillas del mundo