El
arco de entrada tiene tres arquivoltas de bocel, es de medio punto y está protegido por un
pórtico, que exhibe un tímpano de factura
gótica, aun cuando presenta una adoración de los magos en la que los protagonistas están dispuestos de una forma típicamente
románica. Este conjunto escultórico, a pesar de estar bastante deteriorado, es de gran valor, y una de las piezas más interesante de todo el templo.