Bueno, bueno, bueno. ¡Que alegría me habeis dado!
Tabernilla: Me acuerdo perfectamente de ti, incluso creo que llegamos a cartearnos. Eras un rubiales, jugabas de portero y tenías una hermana de muy buen ver. Te fuiste para las Américas y parece ser que sigues allí. ¿Que tal todo?.
Pedro: Por supuesto que se quién eres. Trabajabas en una imprenta y vivías en la
calle Bizcargui de Rekalde. Solíamos salir con Estebín, que era otro
amigo de mi portal.
Por esos tiempos fue cuando me dediqué a la
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