El
convento de
San Ildefonso, fue fundado por Alonso de
Camino, nacido en
Ajo en este mismo
barrio que lleva su nombre. Alonso fue capitán de Felipe II en Flandes, donde por su valía consiguió titulos y fortuna.
En este convento intervinieron los más destacados arquitectos, maestros canteros, y retablistas del momento. Las trazas son de 1588 obra de Diego de Sisniega, y el
retablo mayor en
piedra fue obra de Rodrigo de los
Corrales Isla, ensamblador de
Noja. En el crucero se encuentra el mausoleo de Alonso de Camino y Carrera, con su
estatua orante en piedra. Estuvo ocupado por dominicos hasta, 1835, que Mendizabal suprimió todos los
conventos y
monasterios que tuvieran menos de 12 religiosos.