Obra de Enric Catá y Francesc Guàrdia del año 1911 en la
Plaza Maragall. Es un elemento destacado de estilo clásico pero con detalles modernistas. Destaca en su
fachada principal una magnífica
portada con cuatro recias
columnas que se abre a un gran
salón central. Durante años fue el
cine de Terrassa, pero ya ha recuperado su función de
teatro.