Un sugerente panorama que también se puede admirar recorriendo la
carretera de atrás, donde las olas rompen con fuerza contra la capa rocosa. A lo largo del
acantilado se abren
cuevas y cavidades que ofrecen un punto de vista privilegiado sobre este encuentro entre la fuerza del
mar y el poder de la tierra. Los Hervideros y las
playas más bonitas de
Lanzarote son un lugar de visita obligada para quienes buscan una experiencia auténtica y salvaje.