Tampoco aparece el nombre de
Uga en la relación de lugares afectados por el volcán en las Constituciones sinodales del Obispo Dávila, a no ser que sea el lugar denominado Vega el sustituto de Uga, como hemos dicho más atrás, pues esa es la
fuente de los relatos de Riviere, primero, y de Viera y Clavijo, después (1982a: I, 794). Pero de que el lugar de Uga estaba habitado en esos años no cabe la menor duda, pues así se consigna expresamente en la «Descripzion del estado a que tiene reducida el volcan de la ysla de
Lanzarote» que las autoridades de la isla envían el 29 de diciembre de 1731 al Comandante General