Como resultado se produce la formación de fragmentos superficiales escoriáceos que dan al conjunto de estas coladas de lava un aspecto ruinoso. En conjunto presentan superficies externas caóticas formadas por fragmentos irregulares sueltos. Estas escorias tienen una morfología áspera, espinosa, con gran cantidad de agujerillos internos a modo de burbujas irregulares que aparecen en muchas ocasiones alargadas en la dirección del flujo de la colada.”