Se trata de una
casa casi al final del
pueblo, en la
carretera con dirección al
monumento al Campesino, en la que hay un
museo de lo más extraño. No he llegado a descubrir de qué se trata, pero estaba todo lleno de cosas insólitas, como cabezas de muñecos, figuras en
piedra, creo, ordenadores, y todo tipo de juguetes, antiguos y seminuevos,
bicicletas, muñecos de todo tipo.