Este dato es de vital interés histórico, dado que es el origen, del por qué se empezaba a conocer a la gente de
Lanzarote como "conejeros"Al parecer, los transportistas marítimos de
Tenerife, se referían a sus colegas lanzaroteños como "conejeros", es decir, exportadores de pieles de conejo. Hoy en día este mote se sigue usando cariñosamente para los nacidos en la isla.