En el año 1591, Leonardo Torriano, un ingeniero
militar italiano, recibe el encargo de reforzar las defensas de las Islas
Canarias contra los frecuentes ataques de los piratas, describiendo La Tiñosa, como un
puerto natural. La vez siguiente que se documenta el puerto es en el año 1628, cuando el galeón Piedad descargó un cargamento de maíz en La Tiñosa.