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VIEGO: VINIENDO HOY, MADRUGADOR de un escrito en Aldea del...

VINIENDO HOY, MADRUGADOR de un escrito en Aldea del Rey (Ciudad Real) donde hay un par de plumas que merece la pena leerlas-os invito a ello-, quiero evadirme de los problemas reales que sin quitarme todo el sueño, si trastornan algo mis sentires, hoy voy a tratar de retroceder años, en otro sentido,, por ver que me aportan. Tal vez lo que me dictaba la almohada, no profundice los suficiente en el tema... es cuestión de intentarlo:

ERA UNA TARDE DE HOJAS CAÍDAS
heridas, rodando por el suelo:
algunas como si huyeran
se escondían, murmurando,
arrastradas por el viento.
Hacía ya muchos días
que murieran las rojas amapolas.
Hacía muchos días que te sentías
triste y sola...

Sola cuando me adelanté y adelantado
traté de rellenar tu hueco triste de ternura.
queriendo alumbrar con mi amor tu desventura
porque viéndote sufrir te estaba amando.
Tic, tac: latía mi corazón acelerado,
musitando, despertando nueva aurora.
Te estaba diciendo muy fuerte:"no estas sola,
mi amor, muy crecido está a tu lado.

Las hojas de otoño gemían con el viento,
arrastradas por el suelo, cuando besé tus ojos...
Cuando te presté consuelo, ya tendida en la hierba,
y bebí de tus lagrimas su esencia
musitando muy cerca las palabras mas bellas.
Supe explicarte mujer que me hervía la sangre. Que el corazón me latía muy fuerte, abrazándote
abriendo al amor una gran puerta.

Por que te encontré muy sola...
! tan inmensamente triste,
tan inmensamente bella,
que te dibuje con mis labios
un arco iris de rosas,
un ramo de besos ardientes,
en la tarde... toda!

Y cesó tu tristeza.
Y te escribía versos
de mis manos inquietas
acariciando tu cuerpo.
Y...! Bella, inmensamente bella,
aplacaste mis labios sedientos,
en el instante en que crujían la hierba,
en el momento que ara, traba el viento
las hojas...
en el momento
que la tarde toda.
alumbrara los soles mas bellos.
JM (LIBERTAD)