VIEGO: EN EL CAMINO DE TAGORE...

EN EL CAMINO DE TAGORE
….
A mi querida madre …
Madre… ya tengo muchos años
y muchas espinas y rosas en el alma.
Por eso “ alma de mi alma”
con las rosas sufridas
hoy te he tejido una guirnalda.
Madre … ya es hora de regresar.
Ya corté todos los juncos,
mi barca en el “Ganges” está.
También a aquel rey le visité,
el que tenía un cartero
donde dirigía tus cartas
aunque nunca las mandé.
Me ha dicho que padre
ya pronto regresará,
porque no lo necesita,
el monarca ya está viejo
y se quiere retirar.
Mamá… Ya sabes, me esperas
en la casita del río
que tiene sauces muy viejos
y en noches claras de luna
por el medio de sus ramas
se ven volar los vencejos.
Mi barca la remará
quizá …el primo “Gora”
o alguno u otro brahamán.
Ponte cerca de la orilla.
Tocaré el “gong” al pasar
y me vestiré de blanco
para que me veas llegar.
Mi barquilla …seguro conocerás,
es aquella verde de mimbre
y juncos para remar,
la que tú me regalaste
en el camino de Calcuta
cuando yo iba a estudiar.
Así, que me esperas junto al río.
Y por si no te acordaras
de mi cara y de mi edad.
Te lanzaré la guirnalda
que trencé para ti… mamá.

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nel