Me alegra saber que estás otra vez entre nosotros después de "esa temporada", seguramente interesante, donde tu hayas elegido.
Mi vaquera me concedió una prórroga acompañada de la siguiente canción de los años sesenta:
Cuando llegue septiembre todo será maravilloso;
cuando llegue septiembre se ocultará la luz más pronto.
y la noche sin final será el encanto de septiembre para mí,
porque así más tiempo habrá de oscuridad, de intimidad, de estar muy solos.
En septiembre tu amor, me dices por fín, tendré por siempre,
y es por eso que yo, tú sabes que estoy tan impaciente.
Y la noche sin final será el encanto de septiembre para mí,
porque así más tiempo habrá de oscuridad, de intimidad, de estar muy solos.
Cuando llegue septiembre no vivirán las mismas rosas;
cuando llegue septiembre tu vivirás conmigo a solas.
La, la, la, la, la, laaaaaa
Mi vaquera me concedió una prórroga acompañada de la siguiente canción de los años sesenta:
Cuando llegue septiembre todo será maravilloso;
cuando llegue septiembre se ocultará la luz más pronto.
y la noche sin final será el encanto de septiembre para mí,
porque así más tiempo habrá de oscuridad, de intimidad, de estar muy solos.
En septiembre tu amor, me dices por fín, tendré por siempre,
y es por eso que yo, tú sabes que estoy tan impaciente.
Y la noche sin final será el encanto de septiembre para mí,
porque así más tiempo habrá de oscuridad, de intimidad, de estar muy solos.
Cuando llegue septiembre no vivirán las mismas rosas;
cuando llegue septiembre tu vivirás conmigo a solas.
La, la, la, la, la, laaaaaa
No se..., no se..., a mí me gusta más esa que dice:
Si tú me dices ven... lo dejo todo.
¡Suerte!
Si tú me dices ven... lo dejo todo.
¡Suerte!