¡Bien por los sajambriegos! que se note que esa tierra también da poetas. Menuda risa que pasé con tu historia, Javier. La sala de espera de un hospital, o de cualquier parte, suela dar para mucho y como ves, de todo se saca algo positivo; seguro que mientras escribías, te reías y ahora nos reimos otros ¡si supiera el "pequeño", el dueño del "pequeño", los hermanos del "pequeño" y demás familia para cuánto dieron...! No pierdas la costumbre de participar en el foro y anima a tu hermana que ya lo ... (ver texto completo)