Estoy contemplando un
paisaje asturiano auténtico, prados, pumaraes, sebes amplies; donde los paxarinos faen los niales, arbolado abundante y casuques de cuentu de hadas.
Esa ye la zona, que yo siempre dije, que si pones una
escalera y llames a Dios: El te contesta; porque estáscerquina del
cielo.