Calle Gil de Jaz, OVIEDO

Gil de Jaz
Información personal
Nombre de nacimiento Isidoro Gil de Jaz
Nacimiento 1696
Bandera del Imperio español Sangüesa, Reino de Navarra, España
Fallecimiento 1765
Bandera del Imperio español Madrid, España
Nacionalidad Española Ver y modificar los datos en Wikidata
Información profesional
Ocupación Regente de la Audiencia del Principado
Años activo 1749-1755
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Isidoro Gil de Jaz (Sangüesa, Reino de Navarra 1696- Madrid, 1765). Jurista y regente de Asturias. 1​

Biografía
Celoso regente del Principado de Asturias. Él se consideraba hijo de Sos del Rey Católico, Zaragoza, pues de allí procedía su familia, y allí comenzó a ejercer la abogacía después de obtener brillantemente el doctorado en leyes y cánones. Tendría alrededor de cuarenta años cuando fue nombrado alcalde y oidor del Real Consejo de Navarra, donde permaneció hasta ser promovido a la Regencia del Principado de Asturias, cargo del cual tomó posesión el 2 de julio de 1749. Durante los seis años de su regencia en Asturias, fue varia y abundante la labor realizada: promovió la construcción y reparación de puertos, caminos, puentes y carreteras, figurando entre los primeros el muelle de Gijón, y entre las últimas, la que conducía a dicha villa y la del puerto de Pajares que, iniciada como una "pedrera" a principios del S. XVI por obispo Diego de Muros, fue notablemente mejorada por Gil de Jaz, hasta que Campomanes logró convertirla en Real carretera de León. También parece que se ocupó en la reorganización de los servicios de Correos y estafetas. Pero su obra trascendental fue proponer, primero al Rey Fernando VI en 1751, y llevar a cabo después, inmediatamente, el proyecto de un "Hospicio y Hospital de Huérfanos, Expósitos y Desamparados", al objeto de "reducir al trabajo a los pobres sanos", "recoger a los huérfanos y expósitos" y "doctrinar y hacer laboriosos en parte a los inválidos", ambición ésta que en nada difiere de la moderna y eficaz "recuperación de inválidos", tan en auge entre los americanos; de tal forma que el pensamiento de Gil de Jaz no era sólo cuidar de la manutención y educación de los acogidos, sino instruirlos adecuadamente para su colocación en distintos empleo, industrias u oficios. a esa industria artesanal, fomentada concretamente por el Hospicio ovetense, se refiere Madoz en su Diccionario, pero ya medio siglo antes Jovellanos parece aludir a ella cuando en su VII carta a Ponz le dice: "se ha adelantado bastante el tejido de lienzos y he visto bellas cotonias, colchas, mantelerías, panas, y otros géneros de excelente calidad y apariencia fabricados en Oviedo".

Comenzó a funcionar la fundación en el antiguo hospital de San Lázaro de Oviedo, pero no bastando este edificio, empezó a construirse el 11 de mayo de 1752 el actual -tan bello y suntuoso- inaugurado parcialmente el 7 de septiembre de 1754. La hermosa fachada principal, rematada por un estupendo escudo barroco es obra del genial arquitecto asturiano Pedro Antonio Menéndez de Ambás. El edificio, vastísimo, tenía cuatro pisos amplios con galerías interiores y escaleras de variado valor arquitectónico. Hoy, pese al cubrimiento de algún patio, a los sótanos creados y a tantas y tantas modificaciones e instalaciones lujosas al servicio de la industria instalada, el conjunto sigue pareciendo el mismo de antes, aunque sumido en un sueño de Las mil y una noches.

Cuando apenas hacía tres años que Gil de Jaz desempeñaba la regencia de Asturias fue promovido a la presidencia de la Chancillería de Granada, de la cual, sin embargo, no llegó a posesionarse porque el Rey, sabeedor de la gran labor que había acometido en Oviedo, consintió otorgarle nuevo nombramiento para esta Regencia, posesionándose de ella -segunda vez- el 28 de octubre de 1752, año en el que redactó las Ordenanzas para el régimen y gobierno del Hospicio, modelo de constituciones, tanto en materia administrativa, como por las interesantes doctrinas político-jurídicas que contienen. Continuó Gil de Jaz como regente de Asturias hasta 1755, año en que el Rey, en atención a sus méritos, le nombró Ministro de los Consejos Supremos de Castilla y Guerra. Fue también, en Madrid, asesor de los Reales Cuerpos de Guardias de Corps, de Infantería española y walona, presidente de la Junta de la Compañía de La Habana, etc.

Cuando el Inquisidor general de España, Manuel Quintano Bonifaz, fue desterrado por condenar una obra del abad Mesenghi sin dar cuenta al rey, Gil de Jaz se encontró entre los ocho ministros que aconsejaron a Carlos III en su Decreto de 17 de noviembre de 1761 por el que, en defensa de la regalía, estaba prohibido publicar un breve, bula o carta pontificia, que tocase a establecer ley o regla de observancia general sin ser vista y examinada por el rey. El 25 de agosto de 1760, fundó y dotó Gil de Jaz a sus expensas el Colegio de las Escuelas Pías de Sos, al que instituyó heredero universal de sus bienes y al cual, después de muerto, fueron todas sus alhajas, Representaciones, Ordenanzas, Memoriales, etc. impresos y manuscritos. Sus restos descansan en la capilla de dicho colegio.

Referencias

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