OVIEDO (Asturias)

Calle la Luna

Saltó como un rayu por encima una sebe,
y de una estaquera arrancó un varal,
con él en la mano volviose furiosu,
y gritó:

! Cobardes, volveyos p¨acá!
Eren cinco moros que lu acorralaben,
palos y navayes! casi un arsenal!
y el mio probe solu, sin otra defensa
que aquella estaquina que arrancó al varal.

Daben muchos gritos, movien les navayes,
movien los palos, pero...! ná de ná!

Pasaba una vieya que viendo aquél cuadru,
con un poco de sorna dixo:

! Chavales, quien ye esi que el miedu
en el cuerpu os mete!

Y se oye una voz:

Esi, Esi, Esi ye de! ASTURIES!! No hay que preguntar!

Esta es la historia, como se deduce, de cómo un asturiano
se enfrentó a cinco moros solo con una variquina, y les
hizo frente con valor.

Corresponde tambien a los papeles ded Aladino Riera,
facilitados por Tino el Llocu, en Soria.
Un abrazo, Manolo ... (ver texto completo)
Sonó el pitu,
atronó el cielo un volador que subió.
Cantó el pitu,
y un cuchillu el pescuezu rebañó.
Un pitu, anuncio les fiestes,
y al mismu tiempu anunció,
la muerte de muchos pitos.
La señal fué el volador.
Con el pitu, y por el pitu
anda en mi pueblu la xente. ... (ver texto completo)
ASTURIAS LA SOÑADA

De tanto vivir en tierra parda
se me ha secado el alma,
el verso ha perdido su cadencia
y el día es como una noche larga.
De tanto soñar con robles y felechus
afilar guadañas imaginadas
y trébol y otoñadas
me estoy volviendo seto. ... (ver texto completo)