Quien no conozca el concejo de Ibias, desconocido por muchos asturianos, merece la pena que se tome unos días de descanso y si busca paz, tranquilidad, descanso, buen clima y exquisitos alimentos emprenda la excursión.Está a una distancia de 150 Km de Oviedo, debiendo pasar por Cangas del Narcea y después por el famoso Muniellos, mancha forestal inmensa y riquísima que merece la pena contemplar.Una vez finalizado este recorrido se encuentra el viajero con un hermoso valle , allá abajo, durmiendo bajo el sol, y en él, a un pueblito, el de Cecos, bañado por el río Ibias, y a 3 km de la capital del concejo de Ibias, San Antolín.Cecos es lugarde paz, de descanso, de dejarse acariciar por un cielo azul, y por un perfume de madreselvas que se extiende y penetra con el sol.Caminar por aquellos senderos, recorrer las laderas del río, saborear excelentes hortalizas, disfrutar en la tranquilidad, en la hospitalidadde sus gentes, en tiempos actuales pero que parecen pertenecer a otros tiempos ya muy pasados.Es el otro mundo al que merece de vez en cuando acudir para encontrarse consigo mismo, con los seres queridos.Cecos es un bombón delicioso.