Estamos dando un
paseo, por el paseo fluvial del Nalón: desde La Sota, hasta el
puente de Carrio. El
rio pasa algo escaso de caudal, pero el bosque de rivera que le acompaña, en sus márgenes, enriquece el
paisaje. El estiaje deja ver los regodones y en parte de su cauce seco crece abundante la hierba.