Pequeño
pueblo, esta situado en la Vega del
rió Gueña. Típicas casonas asturianas de corredores de madera y algunos
hórreos,
También encontramos en el pueblo los restos de la que fuera la
casa de Roberto Frassinelli, conocido como “el alemán de
Corao”, llego a Corao en 1845, donde se instalo para siempre embrujado por los Picos de Europa.