LA LUISIANA: Ya lo creo que recuerdo los pinchazos de Juana. A la...

Hola Manolo, gracias por la explicacion, yo recuerdo que enfrente del correo habia una tienda de golosinas y en la puerta vendia helados de un carro con ruedas y a mi me encantaban los cortados. Te acuerdas de la matrona Juana, le tenia miedo por que me pinchaba a menudo.

Ya lo creo que recuerdo los pinchazos de Juana. A la buena mujer por su oficio le tocó ser el coco de todos los niños. De pequeño tuve una enfermedad que me obligaba a ponerme muchas inyecciones pero por muchas veces que fuese a casa de Juana el miedo era el mismo que el primer día. Por entonces tenía la consulta en una casa grande en la esquina de la carretera con la calle Maestro Beltrán. Recuerdo el cosquilleo en el estómago al entrar y como se iba tranformando casi en pánico cuando sacaba esa especie de latilla que llenaba con alcohol, sumergía en ella jeringa y aguja y le prendía fuego durante unos segundos para desinfectarlas. Entonces no había jeringuillas desechables. Juana tenía una aguja enorme que utilizaba para conformarnos. La comparaba con la que iba a utilizar, bastante más pequeña y decía que por ser buenos nos pincharía con la aguja chica. Un truco tonto pero que a mi me consolaba un poco.
Saludos a todos. Me gusta que os animéis a contar relatos de vuestros recuerdos en el pueblo. Gracias Braulito por tu apoyo a la causa.