¿Que color tiene el mar? ¡No lo sé!
Mis ojos ya no ven,
La última vez, lo ví azul,
O tal vez era verde,
Tu desprecio, tu olvido y el desamor,
Me hizo recluirme y llorar,
Entre los gruesos muros de una casona donde yo me crié,
Aquella que daba al parque donde yo te conocí,
Recuerdo los gládiolos, las rosas, y los jázmines,
Pues era primavera, cuando yo te conocí,
De llorar me quedé ciego,
Pero aún recuerdo,
O azul o verde,
Como el manto de la Virgen,
Verde Esperanza,
Como tu nombre divino,
Paloma de los madriles,
Que al Andévalo volaste,
En Alosno, te aposastes,
Y hoy te he encontrado,
Camino de Torre del Mar,
Por el que tu me has preguntado,
¡No lo se! si azul o verde,
Si recuerdo tus ojos negros,
O tal vez verdes,
Como el manto de La Virgen,
A la que yo le rezo.
Esa que a tí Espe, ¡a ti te protege!
He leído tu mensaje, Espe te lo agradezco, estos dias te nombré tambien, haber si la Providencia Divina, hace que salgais de mal trance familar que os afecta
Por parte de Fermina, lor reveses de la vida, llegan sin avisar, sin compansión
Para nadie, hay veces que hasta los oidos tenemos que taparnos, pues hasta las alegrias ajenas nos parecen faltar a nuestras desgracias. ¿Quien no ha llorado alguna vez? Pero tambien hay momentos grandes en la vida y estos son ¡Gloriosos!
Un Beso.
El Poeta.
Mis ojos ya no ven,
La última vez, lo ví azul,
O tal vez era verde,
Tu desprecio, tu olvido y el desamor,
Me hizo recluirme y llorar,
Entre los gruesos muros de una casona donde yo me crié,
Aquella que daba al parque donde yo te conocí,
Recuerdo los gládiolos, las rosas, y los jázmines,
Pues era primavera, cuando yo te conocí,
De llorar me quedé ciego,
Pero aún recuerdo,
O azul o verde,
Como el manto de la Virgen,
Verde Esperanza,
Como tu nombre divino,
Paloma de los madriles,
Que al Andévalo volaste,
En Alosno, te aposastes,
Y hoy te he encontrado,
Camino de Torre del Mar,
Por el que tu me has preguntado,
¡No lo se! si azul o verde,
Si recuerdo tus ojos negros,
O tal vez verdes,
Como el manto de La Virgen,
A la que yo le rezo.
Esa que a tí Espe, ¡a ti te protege!
He leído tu mensaje, Espe te lo agradezco, estos dias te nombré tambien, haber si la Providencia Divina, hace que salgais de mal trance familar que os afecta
Por parte de Fermina, lor reveses de la vida, llegan sin avisar, sin compansión
Para nadie, hay veces que hasta los oidos tenemos que taparnos, pues hasta las alegrias ajenas nos parecen faltar a nuestras desgracias. ¿Quien no ha llorado alguna vez? Pero tambien hay momentos grandes en la vida y estos son ¡Gloriosos!
Un Beso.
El Poeta.