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TORRE DEL MAR: Hola Fermina, gracias y lo mismo digo, me alegro que...

Hola Fermina, gracias y lo mismo digo, me alegro que estar nuevamente entre vosotros, a pesar de haber tenido que abandonar nuestra tierra, bueno abandonar me suena mal, diremos alejarme en la distancia, pues aunque no estoy sobre ella si la llevo dentro de mi.
María me comentó tu pesar, lo que ya preveía por el mensaje que dejó Espe en tu nombre, yo también sentí que no estuvieras allí, pero otra vez será.
El primer día que llegué a Alosno, si no recuerdo mal el día 16 de agosto, allí estaba Conchi, pues nada más ver el coche bajo el arbol, se dijo, ahí está El Emigrao, y camino para casa de mi tía María que tomó, y allí nos encontramos, ya ves, parece ser que sobre los años setenta y dos o por ahí, Conchi dice que me vio en un consultorio de la Seguridad Social que tengo cercano a mi domicilio, incluso nos dimos a conocer y hablamos, pero yo no recuerdo nada de ello, para que veas como son las cosas de la vida.
Como sabes, no pude pasear todo lo que me hubiese gustado, por que Antonia, mi mujer está aquejada de dolores articulares en las rodillas, lo que le impedía caminar lo que quisiera, aunque no para ni un momento, pero no quise que forzara demasiado, por lo que evitaba proponerle un paseillo, por lo que no vi mucho, salvo la zona cercana al domicilio de los familiares, que por cierto, Conchi es vecina de una de mis tias, bueno casi de las dos podemos decir.
Tharsis está muy crecido, están haciendo unas viviendas muy bonitas, la Piscina Municipal también muy hermosa, se respira más alegría entre la gente que hace unos años, por lo que detecto más tranquilidad laboral entre los paisanos, en fin, que se me como más vida, ya me entiendes.
También estuve en Málaga, no capital, sino en Bobadilla, Antequera, Ronda, Campillos, andamos una semanilla por allí y después regresamos a Huelva, bueno a Gibraleón, que por cierto también está creciendo mucho y se está edificando como nunca, casas y más casas, es más, no casas sino pisos, aprovechamiento del terreno.
Y por último estuvimos en Granada, tres días, donde visité Huetor Vega, ya sabes, el pueblo donde residía mi cuñao y amigo Valentín, que en paz descanse.
En fin, vacaciones familiares entre familia y recordando tiempos atrás y actuales, pero que así yo me lo paso fenomenal, imagínate si encima nos reunimos y cantamos, bailamos y si hace falta nos emburrachamos, sobre todo de alegría, así que diviertete cuanto puedas, disfruta del viaje, relajate, y cuidate.
Bueno, vamos a ver si continuo por la geografía española que ya mismo estamos comiendo.
Abrazos para tos y toas, El Emigrao.