Museum Jorge Rando, MALAGA

HISTORIAS DE LOS MUSEOS DE MÁLAGA. Museum Jorge Rando.

El Museum de Jorge Rando se ha inaugurado hace unas semanas, es el ultimo de una larga lista de museos que se adivina en el futuro.
Este museo esta compuesto por cuadros del pintor Malagueño, Jorge Rando, nacido en el año 1941 y una larga trayectoria en Alemania principalmente, expone su obra en galerías de arte de Colonia, Düsseldorf, Stuttgart, Berlín, Múnich y Hamburgo. Se establecio en Málaga y desde aqui ha impartido su magisterio
en galerías de arte de Málaga, Barcelona, Madrid, Colonia y Hamburgo, sino también participa en Ferias Internacionales de Arte Contemporáneo en España y Alemania. Paralelamente escribe sobre la pintura y los pintores y sobre el arte en general.

Edificio

El Museum Jorge Rando se halla anexo al Monasterio de las Mercedarias, en la calle Cruz del Molinillo de Málaga. El edificio fue construido según el diseño del arquitecto D. Manuel Rivera Valentín (1878) y sufragado por su fundadora Dña. Mercedes Bisso Vidal. Se inauguró en el año 1893 y está considerado un edificio emblemático de interés artístico preferente.

Las instalaciones del edificio están conformadas por el convento, la iglesia, el postulado, la casa de guardeses y el colegio–guardería. Cabe destacar la existencia en el patio posterior de un extraordinario ejemplar de mandarino, plantado por la fundadora del convento hace más de 130 años.

Las obras de adaptación de parte del Monasterio a Museo las comenzó el Ayuntamiento de Málaga en el año 2011 y fueron finalizadas en la primavera del 2014 bajo la dirección del arquitecto D. José Antonio González Vargas. La dureza del arte expresionista no podía encontrar mejor emplazamiento que este espiritual recodo.

Barrio.

El Museo se encuentra en el castizo barrio de la Cruz del Molinillo, en el enclave del histórico barrio capuchinero. La calle Cruz del Molinillo y su entorno formaron parte del primer arrabal de crecimiento del centro histórico de Málaga, el arrabal de “Fontanalla”, el más poblado a extramuros. El arrabal estaba protegido por un muro menor a lo largo de todo su perímetro y en él se asentaban los fabricantes de cerámica como atestigua la toponimia de algunas calles actuales, ejemplo de ello es la calle Ollerías. Las actividades alfareras, de herencia romana, se desarrollaron gracias a la disposición de materia prima y abundancia de agua y se expandieron hacia el norte y el oeste del arrabal.

Según se desprende de los documentos de los Repartimientos este arrabal se componía de varias zonas, abarcando otros pequeños arrabales como el de la puerta de Granada y el de la puerta de Antequera, así como una zona de huertas y otra para guardar ganado. Toda la zona al norte del arrabal se mantuvo como Huerta del Molinillo, como reflejan las planimetrías históricas hasta finales del siglo XIX, época en que el proceso de ocupación por las edificaciones se completa. De algunas huertas solo quedan las toponimias como Huerto de las Monjas o Huerto de los Claveles perdurando como último vestigio de aquellos huertos el del interior del Monasterio de las Mercedarias.

Actualmente la calle Cruz del Molinillo se ha convertido en un elemento vertebrador y de cosido de las tramas urbanas de los arrabales originarios y de los ensanches de crecimiento posteriores al norte de la ciudad histórica.

El trazado de la calle Cruz de Molinillo conecta el Puente de Armiñán sobre el Río Guadalmedina con la Alameda de Capuchinos y en su recorrido encontramos edificaciones emblemáticas tales como la Antigua Casa de Socorro atribuida al arquitecto Fernando Guerrero Strachan, el Mercado de Salamanca obra de Daniel Rubio, el Monasterio de las MM Mercedarias construido según los planos del arquitecto Manuel Rivera Valentín o la capilla de la Piedad, una de las señas de identidad del barrio.

El Molinillo es un barrio popular, de paso, de estancia, de vida, de mucha vida. Un barrio que sigue manteniendo su esencia, donde las franquicias todavía no han sustituido los pequeños comercios con esa atención personal casi extinguida, donde los bares no son copias modernistas de tantas capitales europeas sino que mantienen su estilo de tasca donde tomar un moscatel y un mercado en el que los precios y las ofertas se comunican al grito de los tenderos. El visitante del museo puede aprovechar para pasear por este barrio y adentrarse en esa Málaga castiza donde disfrutar de los rasgos distintivos de una ciudad con carácter propio.
El Museum Jorge Rando ya es miembro de esta comunidad vecinal a la que presta su apoyo para enfatizar su visibilidad y participar en las mejoras que le favorezcan, como la plantación de árboles gracias a la colaboración con el Ayuntamiento, manteniendo ese aire malacitano que tanto le diferencia.

Instalaciones

El Museum Jorge Rando ha combinado en su construcción el ladrillo antiguo del claustro con las nuevas instalaciones de hormigón visto y acero oxidado. Una sinergia que mezcla la espiritualidad y sosiego del Monasterio con la dureza del arte Expresionista.

El Museo consta de cuatro salas expositivas. En dos de ellas se ubicará la exposición permanente de Jorge Rando, que se irá renovando periódicamente, las dos restantes se dedicarán a exposiciones temporales de artistas nacionales e internacionales pertenecientes a la corriente Expresionista y Neoexpresionista actual.

Las instalaciones cuentan con otros espacios como la Biblioteca y Centro de Documentación, aseos, áreas de descanso a lo largo del recorrido y un patio interior que permite sentarse a la sombra de un mandarino centenario y disfrutar del entorno.

El Museo está adaptado a personas con problemas de movilidad, dispone de ascensores para el acceso a cualquiera de las plantas y aseos adaptados.

El Museo se identifica materialmente por la concesión de espacio a la ilumininación natural. La luz es un elemento muy significativo en la obra del artista malagueño y ha sido utilizada de la misma manera en el recorrido museístico. En la mayoría de las salas expositivas el visitante podrá observar las obras de la misma manera que fueron concebidas, lo que otorga efectos muy dinámicos en relación a la variabilidad de orientación e intensidad así como en la percepción del espectro cromático.
(25 de Enero de 2019)