Mañana, 16 de julio es el día que la cala se echa a la calle para presenciar a la reina del pueblo, pasear por las calles y por el mar. Desde pequeño he conocído la entrega de fe que se le profesa a la virgen del carmen.siempre asistí a las procesiones, estoy hablando desde el año 1959, que con el uso de razón que te dan los 6 años, estábamos desde antes del inicio de la procesión hasta que la encerrábamos en la iglesia, que aquel entonces me parecía grande y ahora es la iglesia pequeña.era un desfile espontáneo en todo el recorrido, y donde las personas que dependían directamente del mar, aclamaban y paseaban a la virgen con todo lujo de detalles, dentro de la humildad de la época.se cantaba, se vitoreaba y se vivía emocionado toda la tarde. La virgen pasaba, practicamente de casa en casa, visitaba a los enfermos y ancianos, se le preparaban mesas para que, durante el recoorido descansaran los marineros, muchas personas descalzas con promesas y favores recibidos de la virgen con velas en las manos.
Siempre mantendré en la retina de mis ojos los momentos vividos y me acuerdo que de la mano que mi madre, aprendí a conocer la madre de dios, en su advocación del monte carmelo.
Alfonso.
Siempre mantendré en la retina de mis ojos los momentos vividos y me acuerdo que de la mano que mi madre, aprendí a conocer la madre de dios, en su advocación del monte carmelo.
Alfonso.