Lo de las nuevas contrataciones es absolutamente cierto. Para comprobarlo, sólo hay que pasarse por el ayuntamiento, la biblioteca, la guardería y el centro joven... De momento.
Al parecer, el socio veneno adquirió muchos compromisos durante la campaña, no sólo para ganar votos, incluso para completar la lista de su candidatura. Ahora toca empezar a pagar.
Mientras, Mª del Mar agacha la cabeza y pide permiso para todo. Es el precio del sillón.
Durante un tiempo, el ayuntamiento seguirá funcionando aunque sea por inercia, pero ¿qué va a pasar después? Y sobre todo ¿qué va a pasar cuando el sillón lo ocupe Alfonso Veneno?
Al parecer, el socio veneno adquirió muchos compromisos durante la campaña, no sólo para ganar votos, incluso para completar la lista de su candidatura. Ahora toca empezar a pagar.
Mientras, Mª del Mar agacha la cabeza y pide permiso para todo. Es el precio del sillón.
Durante un tiempo, el ayuntamiento seguirá funcionando aunque sea por inercia, pero ¿qué va a pasar después? Y sobre todo ¿qué va a pasar cuando el sillón lo ocupe Alfonso Veneno?