Para dar soluciones reales hay que determinar la verdadera naturaleza de los problemas y su dimensión. Eso sólo se consigue mediante un proceso de análisis y control que se retroalimente de los propios afectados para valorar su resultado.
Mientras los problemas sean aquellos que más votos movilicen y las soluciones aquellas que saquen una sonrisa del electorado, en ningún momento habrá el más mínimo cambio sea cual sea el ocupante del sillón. Discutir sobre el culpable es una pérdida de tiempo que resta recursos a la verdadera solución. Para dirimir esos aspectos ya existe un estamento: LA JUSTICIA tanto en su aspecto administrativo como juducial (para más señas, los de la toga...)
En la actualidad algunos discursos políticos dan para ir al Juzgado antes que leerlos.
En ningún momento daré mi voto a nadie que busque la solución a los problemas utilizando estos como arma arrojadiza frente a los demás.
Por una política transparente. Va por ustedes.
El Apolítico.
Mientras los problemas sean aquellos que más votos movilicen y las soluciones aquellas que saquen una sonrisa del electorado, en ningún momento habrá el más mínimo cambio sea cual sea el ocupante del sillón. Discutir sobre el culpable es una pérdida de tiempo que resta recursos a la verdadera solución. Para dirimir esos aspectos ya existe un estamento: LA JUSTICIA tanto en su aspecto administrativo como juducial (para más señas, los de la toga...)
En la actualidad algunos discursos políticos dan para ir al Juzgado antes que leerlos.
En ningún momento daré mi voto a nadie que busque la solución a los problemas utilizando estos como arma arrojadiza frente a los demás.
Por una política transparente. Va por ustedes.
El Apolítico.