Ah! Solo un consejito:
Si no quieres conocer el lado oscuro del cura más te vale que siempre acates sus órdenes, asientas y agaches la cabeza cuando él habla, porque su palabra es palabra de Dios. Amén.
Si no quieres conocer el lado oscuro del cura más te vale que siempre acates sus órdenes, asientas y agaches la cabeza cuando él habla, porque su palabra es palabra de Dios. Amén.